El
corazón y el hígado de pescado al quemarse ahuyentan los demonios.
Libro apócrifo: Tobías 6:8 versión Dios habla hoy
Él
contestó: cuando una persona es atacada por un demonio o espíritu malo, si se
queman delante de esa persona el corazón y el hígado de pescado, cesa el ataque
y no se repite jamás.
Libro apócrifo: Tobías 8:2 - 3 versión Dios habla hoy
Tobías
se acordó entonces de lo que había dicho Rafael. Sacó de su bolsa el hígado y
el corazón del pescado, y los puso sobre las brasas en las que se quemaba el
incienso. El olor del pescado no dejó acercar al demonio, y éste salió huyendo
por el aire hasta la parte más lejana de Egipto…
Libro canónico: 2 Corintios 10:3-4 Versión Reina Valera Contemporánea
Es
verdad que aún somos seres humanos, pero no luchamos como los seres humanos. Las armas con las que luchamos no son las de este mundo,
sino las poderosas armas de Dios, capaces de destruir fortalezas. Las armas del cristiano no son materiales sino
espirituales, la biblia nunca enseña que algo material haga efecto en los
demonios.
Libro canónico: Efesios 6:11- 16
Vestíos
de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas
del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra
principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de
este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Por
tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo,
y habiendo acabado todo, estar firmes… Sobre todo, tomad el escudo de la fe,
con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.
Libro canónico: Marcos 16:17
Y
estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios;
hablarán nuevas lenguas… si
el alejar demonios dependiera de cosas materiales, no hubiera existido la
necesidad de que Cristo venciera al mal y dejara autoridad a la iglesia para
derrotarlos. Además, si fuera tan sencillo alejar demonios no existieran
personas atormentadas por ellos, ni en la época de Cristo ni en la actualidad.
Intercesión
de los muertos ante Dios. (Oración a los santos)
Libro apócrifo: 2 Macabeos 15:11-14 versión Dios habla hoy
Así
armó a todos más con el ardor de su elocuencia que con la seguridad de los
escudos y las lanzas. Les contó además una visión digna de crédito que había
tenido en sueños, la cual alegró a todos. La visión era esta: el antiguo sumo
sacerdote Onías, hombre bueno y excelente, de presencia modesta y de carácter
amable, de trato digno y dado desde su niñez a la practica de la virtud, estaba
con las manos extendidas, orando por todo el pueblo judío. En seguida apareció
otro hombre, que se distinguía por sus cabellos blancos y su dignidad; la
majestad que le rodeaba claramente indicaba que se trataba de un personaje de
la más alta autoridad. Onías tomó la palabra, y dijo:”Este es Jeremías, el
profeta de Dios, el amigo de sus hermanos, que ora mucho por el pueblo y por la
ciudad santa.”. El profeta Jeremías
cuando es nombrado en este pasaje ya hacia mucho tiempo que estaba muerto, por
tal razón se toma esta cita para sustentar la oración a los santos católicos.
Libro
canónico: 1 Timoteo 2:5
Porque
hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo
hombre.
Libro canónico: Juan 14:6
Jesús
le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino
por mí. La única forma de llegar al Padre es
por medio de Jesucristo, por tal motivo Él solo puede mediar e interceder por
nosotros.
Libro canónico: 1 Juan 2:1
Hijitos
míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado,
abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. La palabra griega de la cual se tradujo abogado es parákletos y también
significa intercesor.
Libro canónico: Eclesiastés 9:5-6
Porque
los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen
más paga; porque su memoria es puesta en olvido. También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y
nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol. Todo aquel que muere es llevado en espíritu al lugar que
por su elección haya escogido estando en vida, el que sirvió a Cristo será
llevado al paraíso, y el que se dedicó a hacer lo que a Dios no le agrada su
lugar será el infierno; pero una vez estando en esos lugares ya no tendrán
parte en nada de lo que pasa en esta tierra.
Se
promueve el suicidio como una acción noble.
Libro apócrifo: 2 Macabeos 14:41-42 Versión
Latinoamericana
Cuando
ya los soldados ocupaban la torre y mandaban a buscar fuego para incendiar la
puerta de entrada y forzarla, Razis, viéndose cercado, se traspasó con su
espada;" prefería morir noblemente antes que caer en manos de esos
bandidos y sufrir ultrajes indignos de su nobleza.
Libro canónico: Éxodo 20:13
No
matarás. Éste es uno de los 10 mandamientos.
Libro canónico: 1 Corintios 3:17
Si
alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo
de Dios, el cual sois vosotros, santo es. A Dios no le agrada el suicidio, primero que todo va en
contra del mandamiento y segundo, el cuerpo del creyente es el Templo del
Señor.
ERRORES HISTÓRICOS DE LOS LIBROS
APOCRIFOS.
Además de los errores doctrinales encontramos en algunos de estos
libros errores históricos, los cuales muestran su tardía elaboración con relación
a la historia escrita, además de que varios de esos libros son fantasiosos, en
donde los sucesos nunca ocurrieron. Entre los datos falsos tenemos:
Libro apócrifo: Judit 1:1 Versión Latinoamericana
Hacía
doce años que Nabucodonosor, rey de Asiria, reinaba en la gran ciudad de
Nínive. Arfaxad, que en aquel tiempo reinaba sobre los medos, en Ecbátana. Está demostrado históricamente que Nabucodonosor nunca
tuvo la sede de su gobierno en Asiria, la colocó en Babilonia, y aunque sí
conquistó Asiria nunca la convirtió en la capital del imperio.
Libro apócrifo: Baruc 1:1-2 Versión Latinoamericana
Estas
son las palabras del libro de Baruc, hijo de Nerías, descendiente de Maasías,
de Sedecías, de Sedeí, de Helcías. Lo escribió en Babilonia el año quinto, el
día siete del mes, desde que los caldeos se apoderaron de Jerusalén y la
incendiaron. En esta cita supuestamente Baruc,
secretario del profeta Jeremías, está en Babilonia, sin embargo, el profeta Jeremías
dejó escrito que él y Baruc fueron llevados a Egipto.
Libro canónico: Jeremías 43:4-7
No
obedeció, pues, Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de la gente de
guerra y todo el pueblo, a la voz de Jehová para quedarse en tierra de Judá,
sino que tomó Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de la gente de
guerra, a todo el remanente de Judá que se había vuelto de todas las naciones
donde había sido echado, para morar en tierra de Judá; a hombres y mujeres y
niños, y a las hijas del rey y a toda persona que había dejado Nabuzaradán
capitán de la guardia con Gedalías hijo de Ahicam, hijo de Safán, y al profeta
Jeremías y a Baruc hijo de Nerías, y entraron en tierra de Egipto, porque no
obedecieron a la voz de Jehová; y llegaron hasta Tafnes.
Además de las evidencias antes expuestas, podemos añadir algunas
declaraciones encontradas en estos libros que revelan la no inspiración de sus
escritos, un ejemplo es que Dios nunca habla, o también el motivo de la elaboración.
Veamos:
PARA DESCARGAR ESTE ARCHIVO EN
FORMATO PDF ACCEDE AL SIGUIENTE LINK:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario